Sinceramente, nunca lo llegue a entender. Cambia de opinión y de perfume como de ropa interior y no le gusta
peinarse aunque últimamente me deja tocarle el pelo…
sabe que me relaja.
Hace mucho que le conozco, de toda la vida diría yo…Estuvo en mi bautizo, ¿saben?
Creo que esa fue nuestra primera juerga juntos.
Yo crecía y el conmigo. Creo que jamás lo llegue a soportar, me sacaba de mis casillas, joder...me daban ganas de matarle a palos, pero no se por que siempre acababa abrazándole....
me podía su maldita ternura.
Me hacía rabiar el jodido, y cada día se inventaba, entre
chiste y chiste, un mote nuevo con el que martirizarme....
Cuando no, me pellizcaba el culo. Era un pesado.
Es dueño de la nobleza y del derroche de alegría. Aunque ha pasado por altibajos nunca fue de montarse en atracciones de feria, incluso cuado yo le insistía.
Ahora solo se me ocurre decirle que es un idiota, un retrasado, estúpido,
tonto, memo, majadero, cretino, necio, insensato, un borrico…
y que le quiero, que hoy estoy orgullosa de verle feliz.

Te lo mereces.
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