un fisco de aire

Vino y se asomó a la ventana de mi casa
metió la cabeza y casi casi se le cae el cuerpo padentro pero se acordó de lo que le decía la madre de no echar el cuerpo palante al alongarse.

Se asomó y alumbró con una linterna
al suelo al techo a las paredes y las esquinas.
y vio cosas que le gustaron y las apuntó en una lista para estudiárselas más tarde
no era especialista en decoración de interiores pero lo que vio le parecía bonito para quedarse algo para si.

Se asomó agarrándose al alféizar y  casi casi se le cae el cuerpo padentro,
pero se agarró al alféizar

No tiró la maceta del alféizar, menos mal eso sí
porque recogerla del suelo hubiera sido lo más parecido a una tragedia de las de antes,
tuvo cuidado

vio colorines, desorden y  tregua
salvia y perenquenes
librillos y artes
lucecitas y flores

se asomó
y se agarró al alféizar
pero con los ojos llegó hasta el fondo del pasillo
recorrió todos los surcos de las paredes  con los ojos
agarrándose al alféizar,
los marcos de las puertas sin pintar y las baldosas estriadas del piso cochino
los lunares y el olor a humedad de las rendijas sobre la manta del sillón y los surcos de la cara
casi casi se le salieron los ojos.

si
se asomó,
agarrándose al alféizar

y dejó una rendija abierta
no para volverse a asomar más tarde,
si no para que entrase un fisco aire padentro.