cactus que pinchan

Y somos las mismas petardas que siempre imaginamos ser y las que nunca quisismos reconocer que fuimos. Que esto es así amiga, un día arriba, un día abajo.. otros días bajo tierra. Porque si, es ya algo inevitable. Échale un par de... limones.

Pero no compares esto con los ojitos que pones cada vez que hablas de él. (porque si, pones ojitos..y no son esos ojitos achinados que tú y yo sabemos precisamente)