También sabe gruñir.

Creo que de todos los castillos en los que he estado, el suyo es el mejor.. seguro que es porque tiene escaleras, aunque nunca he pasado del primer piso, pero me enamora, y más me enamora su guardián, un dragón de dos cabezas con un nombre que significa ''alguna vez'' (lo que no se sabe ni como, ni cuando, ni que vez, o si hubo alguna vez, o un nunca jamás en su corazoncito que reclama besos y excesos, pero se sabe que palpita como si no hubiese un mañana). Tiene un carruaje rojo sin seguridad central adornado con flores y caricias que dejaron huella.
Lo siento, pero no se trata de hablar de alguna princesa..sino de La Princesa, la que baila sin complejos, la que se ríe hasta morir, la que saluda a desconocidos, la que te arropa del frío y la que con una mirada de ojos sinceros y telepáticos te desvela si esta 'pasable o menos pasable'. Si, le gustan los dulces, y los caramelitos, bollitos y derivados que acaben en ''ito'' y te quiten el hipo. He mencionado su pelo? no aludo más a el, porque es como algo así..como decir... viviría en él! eeeeeeeeeeeees tan tan salvaje, casi como ella. Porque es toda una salvaje, por muy princesa que sea y lleve tacones los días de guardar, es la primera que se desmelena, acompañada o no. Para ser princesa, es como una mami. Te lleva, te trae, te recoge, te deja, te peina, te achucha, te hace carantoñas y te da la merienda. Pequeña y grande al mismo tiempo. Tiene superpoderes. Y el mejor super poder de todos, la empatía. Es capaz de dejar de comer para que otros coman. De estar sentada para que otros dejen de estar de pie. Sonríe para que otros sonrían.
Es, creo que la mejor princesa del mundo. No tiene traje de pedrería, ni zapatos de cristal, llega mas tarde de las doce y come con las manos. Pero princesa, que llora la ausencia de cualquier príncipe azul, verde o violeta, pero camufla las ganas con guiños a escondidas y se permite el lucrarse la mirada en recintos cerrados cuando lo importante del momento es aprenderse la hoja subrayada que te mira desde la mesa.(y en sitios abiertos también)
Es entrañable, la única princesa que me cae bien. Y me gusta sus carcajadas, sus reflexiones de persona cada vez menos cuerda y sus anillos reales.(aligualito se los robo).